La maleta
¿Lo qué hay en la maleta?
Un hombre murió. Al darse cuenta, vio que Dios se aproximaba y tenía una maleta con él. – Y Dios dijo: Bueno hijo, es hora de irnos.
El hombre asombrado preguntó: ¿ya… tan rápido? Yo tenía muchos planes. Siento mucho, pero es el momento de tu partida.
¿Lo qué hay en la maleta? Preguntó el hombre. Y Dios respondió. Son tus pertenencias!!! – ¿Mis pertenencias? – ¿Mis cosas, mi ropa, mi dinero?
Dios respondió: Si, eso nunca fue tuyo, todo era de la tierra.
¿Entonces son mis recuerdos? – Ellos nunca fueron tuyos, eran del tiempo.
¿Mis talentos? – Ellos no te pertenecían, eran de las circunstancias.
¿Entonces mis amigos y mis familiares? – Siento mucho, ellos nunca te pertenecieron, ellos eran del camino.
¿Mi mujer y mis hijos? – Ellos nunca te pertenecieron, eran de tu corazón.
¿ Y el mi cuerpo? – Nunca fue tuyo, él era del polvo.
¿Entonces, y mi alma? – No!!! Esa es mía.
Entonces, el hombre lleno de miedo, cogió la maleta de Dios y al abrirla se dio cuenta que estaba vacía. Con una lágrima de desamparo brotando de sus ojos, el hombre dijo: ¿Nunca tuve nada? – Si, cada uno de los momentos que viviste fueron tuyos.
La vida es solo un momento. Un momento solo tuyo. Por eso, en cuanto estés en el tiempo, disfrútalo en su totalidad.
Vive el ahora.
Vive tu vida. Y no te olvides de ser feliz, pues es lo único que realmente vale la pena.
Las cosas materiales y todo lo más por lo que luchamos, se queda aquí. Tu no llevas nada.
Valora aquellos que te valoran a ti, no pierdas tiempo con alguien que no tiene tiempo para ti.
Piensa en tu maleta – y, Felicidades!!!
(Autor desconocido)
Manuela Rodriguez.